Papá Noel me trajo de regalo la última biografía oficial de Jackie Stewart "Winning is not enough", hasta ahora voy por la página 120 (el libro tiene 550 páginas aprox.) y es de lo mejor que he leido en mucho tiempo. Además el libro viene con un DVD. Cuando lo termine de leer se los comento algo más extensamente, pero desde ya se los recomiendo.
Les adelanto que Stewart dice en el libro que uno de los momentos cumbre de su carrera deportiva fue cuando Fangio fue a su encuentro (y no al revés), cuando el escocés ganó el GP de F3 en Mónaco 1964. (p. 104 y 105). Quien hizo de traductor ese día entre Fangio y la entonces joven promesa del volante es amigo mío, anoche hablé con el por teléfono y me comentó que todavía recuerda la cara de asombro de Stewart ante el deseo de Fangio de conocerlo y felicitarlo por su notable victoria. Ese día nació una gran amistad entre ambos que duraría el resto de la vida del Chueco.
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Si el automovilismo fuera una religión, su Dios sería Fangio.
No quiero que en mi epitafio pongan NUNCA TUVO UN TORINO
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