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Creo haberlo escrito antes, TC era el de antes, ahora habria que buscarle cambiar el nombre!!! ejejej
El TC ha evolucionado un montón y lo que se viene son cambios más radicales aún. Más arriba dije "Al TC hay que tomarlo como viene o no tomarlo". Del antiguo TC sólo queda la historia, una historia plena de gloria, anécdotas, personajes inolvidables, carreras memorables, autos y carreras que jalonaron el TC, la ruta, los lomos de burro, la gente tirándose sobre los autos en las paradas para recojer los bidones, los aros con los mensajes que agarraban los acompañantes, los vuelcos y revolcones en medio de la nube de tierra, los muertos entrañables que se nos anudan en la garganta cada vez que los evocamos...tantas cosas en estos setenta años...De todo ese lindo folclore ya casi nada queda, sólo los asaditos en familia, y una que otra costumbre medio futbolera de las barras y las hinchadas, las banderas, la hermandad de los fierreros y no mucho más. Hoy el TC es una categoría altamente remunerada y remunerativa, modernizada al extremo y que se subió a un avión que no vuelve nunca más. El TC folclórico aún sobrevive a duras penas en las categorías zonales donde se corre más con las ganas y con el corazón que con los medios mecánicos, pobres, pobrísimos a veces, pero con una grandeza de espíritu que conmueve. El TC, aquel TC de las cupecitas y de los autos de calle pintarrajeados, puso primera, apretó el fierro y se fue dejando una nube de tierra, a subirse al podio de la Historia Argentina, con toda la gloria de sus Campeones y sus máquinas hechas por ellos mismos. Pero al TC, tanto el de ayer como al de hoy, para poder seguirlo, siempre el requisito fue el mismo: hay que amarlo con todo el corazón, porque es la única forma de bancarse todo lo que el TC exige, más allá de las épocas y de sus cambios.
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Sangre Miura...Pasión Torino
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